Las aguas bajan turbias
Un estudio solicitado por la Intendencia de Montevideo, y presentado este fin de semana por La Diaria, dejó en claro que el 32% de las muestras de agua embotellada entregaron resultados que no cumplen con las normas establecidas para el consumo humano.
La Intendencia de Montevideo (IM) realizó una serie de estudios sobre agua mineralizada y saborizada en botellas de vidrio y tereftalato de polietileno (PET) que entregó resultados muy preocupantes ante el alto consumo que tienen estos productos.
Un estudio realizado sobre el consumo de este tipo de aguas tiene a Uruguay en el tercer lugar en América Latina. Los uruguayos tomaron, per cápita durante 217, un 97,4 de litros de agua envasada; el dato de 2012 hablaba de 68,3 litros anuales por persona. Uruguay cuenta con grandes empresas multinacionales y también con emprendimientos nacionales y locales. En gran parte se da por las dudas que viene generando en estos últimos años el agua de red en cuanto a potabilización.
El informe al que accedió el semanario capitalino, tras solicitárselo a la IM, sobre diferentes marcas entre 2010 y 2018. Desde la mirada microbiológica se deben cumplir determinados requisitos físico-químicos.
Multas por la salud
Las multas realizadas entre 2012 y 2017 fueron por diferentes factores, uno de ellos es la ‘presencia elevada de coliformes totales’, como así también la presencia de Pseudomona aeruginosa. Otras empresas, que fueron sancionadas, contaron en sus productos con ‘elevado recuento de aerobios mesófilos’, como así también una elevada presencia de ‘estreptococos fecales’.
Las grandes empresas de la industria del agua envasada o saborizadas salieron a responder al estudio de la IM con sus propios datos buscando tranquilizar a sus usuarios. Los errores de rotulación y de falta de registro por el Servicio de Regulación Alimentaria (SRA) pueden ser muy contraproducentes para la sociedad.
La potabilización con cloro que realiza OSE (Obras Sanitarias del Estado) mata todas las bacterias que pueden encontrarse en los manantiales o pozos que usan las empresas embotelladoras. Muchas compañías utilizan el agua de red, con algún otro proceso; mientras que otras utilizan agua de la naturaleza y la falta de potabilización podría generar que se permitan la contaminación natural.
En el Laboratorio Tecnológico del Uruguay (LATU) se autoriza el ingreso de aguas provenientes del extranjero. Allí las marcas más reconocidas deben acreditar su salubridad. Aunque no hay informe de presencia de contaminantes, un total de 320 muestras no superaron las pruebas y no recibieron el certificado de calidad.
Aún cuando el agua envasada parecer ser la mejor solución ante la contaminación que podría tener el agua de red, o el propio descontento de la población, también hay una falta de controles o de compromiso en las empresas que llevan adelante este negocio que puede terminar jugando con la salud de la población uruguaya.
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Martín F. Baldi Viera
Periodista y Productor - 11/06/18