Un tiro al aire
Como todos los domingos de todos los meses y años , se juega al fútbol en cada cancha en mi ciudad, donde los vecinos se van a entretener y a pasarlo bien. Ahora lo hacen las mujeres. Será por un tiempo una nueva fuente de tensión hasta que llegue la aceptación de una nueva realidad.
Si como vemos los entrenadores son varones en su mayoría, cuando entiendan y dominen la estrategia, tan necesaria para sostenerse en este y cualquier otro deporte, se verán los intercambios de roles, y de seguro se formarán equipos mixtos, y muchos dirigidos por mujeres.
Pero ahora, que recién empieza, llama la atención ver a las chicas correr con pantalones cortos, que mal que les pese, es una fuente extra de motivación para recuperar público a los estadios. Mientras las madres y las hermanas o las tías o la dueña del almacén, la funcionaria o la escribana jueguen, los niños lo harán en los areneros o andando en bicicleta con los papás, cuidados por la profe, que se ganará unos pesos extras haciendo lo que sabe.
Pero todavía no, y es lo que me anoticia mi amigo, que quiere contar un episodio que ocurrió hace algunos días en una cancha de por acá cerca.
Todo fue tan rápido, que aún no quedó claro lo que de veras pasó.
Dice el:
Todos estamos tensionados, cada cual por lo que entiende de violencia que ejerce o recibe, y ahí aparece el grito el insulto ante un fallo que creemos injusto, y todos se abalanzan . Nadie retrocede, me recuerda, cuando alguien insulta, tiende a ir hacia adelante, atropella. Así fue lo que ocurrió, cuando el técnico de uno de los equipos se levantó del asiento, fue hasta el borde de la cancha y le gritó a una jugadora de su equipo: “Levantá las manos y quédate quieta…
No me vas a creer, me dice …el policía que estaba delante de él, levantó las mano sin darse vuelta.
El juez dijo: siga, siga y el juego siguió. La jugada derivó en penal, ¿vos podés creer?.
El técnico estaba como loco, y le grita de nuevo a su jugadora preferida: “¡agarra la pelota y tirá vos…”!
Ahí mismo, el policía -que era mujer-, desenfundó el arma reglamentaria y tiró.
Nadie vio nada, como siempre …
Junio 2017
Ovidío 'Titico' Díaz
Representante OSC Puentes